Objetivos específicos en relación a la producción de textos escritos:

• Escribir textos breves sobre un contenido específico.
• Escribir frases y oraciones simples bien construidas, con letra legible, separando correctamente las palabras.
• Comunicar por escrito alguna información, opinión o sentimiento, utilizando un vocabulario de uso frecuente.

 

 

 

El lenguaje es la principal herramienta a través de la cual el ser humano construye y comprende el mundo que le rodea.

Las capacidades comunicativas tanto orales como escritas son fundamentales para que los estudiantes sean capaces de comunicar  tal cual lo que ellos desean y principalmente para ser parte de una determinada comunidad cultural.

Desarrollar la expresión oral y escrita supone de variadas tareas y desafíos a la hora de enseñar. Es claro que el lenguaje primeramente se desarrolla de manera oral, los seres humanos desarrollan el  lenguaje oral sólo con el hecho de convivir con una determinada comunidad lingüística, mientras que  la escritura requiere de mucha práctica, de comprender los elementos que se disponen para construir un mensaje como lo son los de carácter lingüístico (grafemas) y los de carácter paralingüístico (signos de puntuación, espacios, sangrías, negrilla, subrayado, etc.) 

 

Expresarse por escrito requiere ordenar, clasificar y transmitir creativamente  sus ideas en diferentes contextos. Este aprendizaje es fundamental también para desarrollar el pensamiento creativo, entendido como la capacidad de imaginar, generar y relacionar ideas y cuestionarse sobre el mundo que los rodea para contribuir a él.

 

Para escribir bien se requiere:

 

• Leer mucho.

• Cuidar la ortografía. Un texto con faltas es algo bochornoso.

• Leer lo que hemos escrito y poner cuidado en que los puntos coincidan con el final de las oraciones. Si lo que se lee no tiene sentido hay que corregirlo.

• Consultar el diccionario para usar las palabras correctas.

• No repetir palabras como "entonces", "pero", "y"... 

 

Parte de expresarse correctamente depende de ser lectores activos. La siguiente imágen establece las partes de un lector y será un motivante para los niños a la lectura y buena escritura:

 

 

La adquisición del Lenguaje Escrito es un proceso ontogenético muy temprano, que supone la creación de un segundo código de lenguaje humano, a partir de la génesis del lenguaje natural (que es el Lenguaje Oral), ya desarrollado en la etapa anterior de sujeto. Dicho proceso comienza entre los 18-24 meses y termina entre los 7-8 años.

Como todo proceso, la adquisición del Lenguaje Escrito, en general, y de la lectura en particular, representa una transformación neurolingüística o madurativa, psicolingüística o cognitiva y sociolingüística o cultural para el sujeto. Los niños de Educación Infantil y Primer Ciclo de Educación Primaria son a quienes afectan directamente las distintas fases de esta “metamorfosis” singular.

Las cuatro fases en que se divide esta primera adquisición del Lenguaje Escrito son:

1.       Fase de Identificación (2 – 4 ½ años). Lectura Perceptiva y Escritura Grafomotora: El niño percibe los significados: signos semióticos.

2.       Fase de Asociación (4 ½ - 5 ½ años). Lectura Combinatoria y la Primera Construcción de la Palabra: El niño empieza a percibir los significantes, sin conexión a sus significados: signos semióticos.

3.       Fase de Análisis (5 ½ - 6 ½ años). Lectura Alfabética y Construcción del Texto Paratáctico o Aditivo: El niño percibe los significantes en unión a sus significados, mediante reglas morfo fonológicas: signo lingüístico.

4.       Fase de Generalización (6 ½ - 8 años). Lectura Universal y Construcción del Texto Hipotáctico: El niño mantiene el signo lingüístico y lo inculturiza. 

Las dos últimas fases de este proceso, que se desarrollan durante el 1er y 2º básico, deben su desarrollo superficial a las estructuras subyacentes que movilizan todos y cada uno de sus estadios. Pero no podemos obviar la influencia que el contexto ejerce a lo largo de este proceso, de manera que si resulta favorable, actuará como catalizador y provocará un efecto multiplicador de los resultados. Esta realidad, empíricamente demostrada, subraya la adecuación de favorecer propuestas didácticas que exterioricen, en el contexto, estructuras paralelas al proceso cognitivo, con el fin de obtener los resultados más favorables.

Un aspecto a tener en cuenta es que las edades que delimitan cada una de estas fases debemos entenderlas como aproximaciones orientativas, en tanto pueden darse casos en que se complete un determinado estadio y se pase al siguiente antes o después de la edad señalada, dependiendo del ritmo evolutivo del niño, que es quien verdaderamente marca el inicio y el fin de cada fase. Por esto, no debemos entender estos periodos como momentos rígidos en el desarrollo del alumno, sino que han de caracterizarse por su flexibilidad temporal: lo importante es que el niño complete cada uno de los estadios. 

El integrar la enseñanza de la lectura y de la escritura requiere de diversas estrategias y actividades que los docentes deben implementar dentro del aula. Pero para esto es fundamental comprender primero las semejanzas existentes entre el proceso de esctambién de la información y conocimientos previos que poseen los estudiantes.

Tanto en el proceso de lectura como en el de escritura, ocurren etapas simultáneas  a lritura y el proceso de lectura. Esta es que ambos procesos están asociados al lenguaje, los cuales dependen necesariamente del lenguaje oral, como a hora de elaborar y comprender un texto. A estos procesos Pearson y Tirney los dividen en 4 etapas que son las que sigue el lector:

1.      Panificación

2.      Composición

3.      Edición

4.      Regulación

Por ejemplo, en el proceso de planificación tanto el lector como el escritor establecen un propósito de la lectura, en definitiva, en cada una de las etapas el lector y el escritor actuarán paralelamente. De ahí la importancia de integrar la lectura con la escritura en el proceso de enseñanza aprendizaje, para que de una u otra forma los estudiantes comprendan la estrecha relación de ambos procesos.

            En la enseñanza de la escritura un factor esencial es integrar la lectura de manera que al elaborar un escrito se tenga real conciencia de lo que se hará, de qué tratará, etc. Y para esto es necesario tomar en consideración los aspectos mencionados anteriormente, el lenguaje oral y los conocimientos previos de los estudiantes.

            El proceso de enseñanza de la escritura tiene cinco etapas fundamentales (Graves, 1983)

1.      Organización del aula.

2.      Elección del tema

3.      Modelado de la escritura

4.      Revisión

5.      Publicación

En cada una de estas etapas es primordial considerar los conocimientos previos e intereses de los estudiantes, ser un docente guía, orientador y facilitador de los aprendizajes, emplear estrategias de motivación constante, lograr la participación activa de los niños, darle énfasis al trabajo de todos los estudiantes y potenciar las aptitudes de cada uno de ellos para concluir un trabajo eficaz como curso.

            Cada uno de los procesos de escritura necesita obligatoriamente de lectura, por ende, se integran ambos procesos a la hora de enseñar. Y al final del proceso de escritura se enfatiza la lectura de cada uno de los escritos elaborados por cada uno de los estudiantes, que se convierten en texto significativo para los niños al ser un texto mucho más cercanos a su realidad y cotidianeidad.

 

FUENTE:

-          Mohamed. L, Fernández. A, Fuentes. R, Carrasco. C. (2009). “Aprendizaje de la lengua escrita”. Psicología de la Instrucción.

-           L. Quiroga, W. Miranda (2008). “Lengua Oral y Escrita”.

-          MINEDUC.(2012) “Bases Curriculares”. Lenguaje y Comunicación. Educación Básica.

 

   Dentro de las estrategias que se utilizaron para el diagnóstico fue un instrumento de observación que permitirá evidenciar muchas de las fortalezas y debilidades de los estudiantes en el diversas clases. A partir de diversos criterios se obtendrán los resultados que permitirán evaluar a los estudiantes a la hora de aprender y desarrollar sus actividades. 

El Instrumento de evaluación diagnóstica desarrollado para este nivel busca determinar si existen ciertos aprendizajes y habilidades ya fijados en el niño (a), los cuales deben corresponder a los contenidos vistos en 1°año básico. 

Se busca detectar las conductas de entrada o aprendizajes previos mediante el trabajo en  objetivos que resulten representativos y significativos de la conducta de entrada. 

Esta evaluación está referida a criterio o con un enfoque edumétrico, estará centrada en el logro individual, es decir compara el progreso de los alumnos con respecto a sí mismo y referido a un patrón previamente establecido; en este caso con respecto a los objetivos de las Bases curriculares. Será  el punto de inicio de un proceso reflexivo apoyado en evidencias  que permitan comprender aspectos de la realidad y del proceso que va vivenciando el alumno y la alumna, es decir será una evaluación como  comprensión desde una Dimensión Crítico/Reflexiva, constituyéndose en una instancia de conversación sobre el aprendizaje y discusión sobre la enseñanza tanto entre los docentes de la asignatura, como con los mismos alumnos, facilitando la comprensión de lo que sucede en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Los resultados de esta evaluación facilitarán la reorientación del proceso de enseñanza y aprendizaje.  No sólo en lo que se refiere al trabajo de los alumnos sino a la planificación de la enseñanza durante todo el año, constituyéndose en una guía que permita al docente saber si es adecuada la metodología, si los contenidos son pertinente y finalmente si el aprendizaje que se ha producido es significativo y relevante para los alumnos y alumnas del grupo curso.

 

• Como se mencionó anteriormente. Se utilizó una escala de apreciación en cinco clases de Lenguaje y Comunicación, para obtener una información más clara del diagnóstico:

• Escala de apreciacion clase diagnóstico.doc (39424)

• También se realizó una evaluación que involucra variados contenidos, sin embargo, el objetivo fundamental de esta prueba es identificar si los niños tienen conocimientos básicos de cada área, pero fundamentalmente reconocer la expresión escrita, ya que durante cada una de las observaciones directas en cada clase, se detectó como una de las principales falencias la escritura de los niños.

• Prueba de Diagnóstico.doc (810496)

 

 

Tras realizar el diagnóstico a los estudiantes del 2° básico B, podemos concluir que el criterio que estuvo mejor logrado, fue en relación a los contenidos que los alumnos debieran tener adquiridos en esta etapa.Mientras que el criterio que estuvo menos logrado es el que tiene relación con la elaboración coherente de escritos. En la evaluación hay muchas preguntas abiertas para reconocer la calidad de la escritura en los estudiantes. Sin embargo en este criterio solo un 41,52% de los alumnos  logran redactar coherentemente una oración o un párrafo, es decir, un 58,48% de los estudiantes logra parcialmente o simplemente no logra escribir un mensaje que tenga cohesión y coherencia.

Del total de los estudiantes 9 tienen dificultades en mensajes de carácter paralingüístico, es decir, en relación a los espacios (escriben en carro), en la ortografía y en la puntuación. Mientras que 6 de ellos tienen dificultades en los mensajes lingüísticos, es decir confunden claramente los grafemas y 3 no conocen muchos grafemas.

 

 

Análisis de casos

1.- Alumno sobre el promedio: 

Estuiante N° 22.

2.- Alumno promedio: 

Estudiante N° 42

3.- Alumna bajo el promedio: 

Estudiante N° 26.